No lo vamos a negar. Ya tenemos todos un ojo puesto en 2025, en las compras (aka caprichos) que vamos a hacer, en los viajes que vamos a reservar o en esos buenos hábitos que queremos retomar… o incluso empezar a hacer por primera vez. Hablando de compras, en el terreno de la imagen y el sonido hay un tema que suele generar bastantes dudas y que no siempre sabemos cuál es la decisión correcta, porque desde luego que no hay ni una sola: ¿qué me compro, un proyector o televisor? ¿Qué es mejor?
Siempre suelo decirte que no hay una única respuesta correcta, porque cada uno de nosotros tenemos nuestras propias necesidades, presupuestos y gustos. Y esto hay que conjugarlo para encontrar la mejor opción que se adapte perfectamente a nuestros requisitos.
Por eso, ante la pregunta de proyector o televisor, no podemos decirte si uno u otro, si blanco o negro, porque sería un error de base. Al contrario, voy a contarte por qué sí escogería un proyector y por qué no y, a la inversa, también por qué optaría por un televisor o por qué no. Vamos allá.
Proyector o televisor: estos son los factores que debes valorar
Dónde vas a usarlo:
Esta es, para mí, la primera pregunta que te debes hacer, porque ya de base es lo que va a determinar si es mejor una opción u otra. Si vas a dejarlo fijo en una habitación y no tienes intención de cambiar, está claro: el televisor es la mejor alternativa. Al final, las especificaciones y posibilidades son más avanzadas a igualdad de precio, por lo que no tendría mucho sentido que, por ejemplo, para el salón escogieras un proyector.
Algo diferente es si piensas moverlo, si quieres ir cambiando de habitación: del salón al dormitorio, a la terraza en las noches de verano… Para estos casos, si solo puedes comprar un dispositivo, el proyector es la mejor opción, porque te da esa versatilidad que no tiene un televisor.
Cuánto espacio tienes:
Si tienes poco espacio, olvídate de un proyector. Es un poco trampa este dispositivo. El tema está en que, aunque el aparato en sí tiene unas dimensiones muy compactas y definitivamente ocupa mucho menos que un televisor, en realidad necesitarás espacio para la proyección y una pared o espacio en blanco (que puede ser una sábana, una pantalla de proyección…).
Por lo tanto, si tienes poco espacio, mejor elige un televisor de las pulgadas que mejor se adapten. Si tienes mucho espacio y la posibilidad de tener una pantalla en blanco, el proyector es buena alternativa.
Cuánto brillo necesitas:
Por definición y a igualdad de precio, un proyector ofrece mayor brillo que un televisor y es una buena opción si vas a usarlo principalmente en entornos oscuros, porque se adapta bastante bien.
Ojo, esto no quiere decir que no haya televisores con un excelente nivel de brillo, mayor que el de los proyectores. Pero probablemente te tengas que ir a una gama más alta, que está muy bien y es una buena opción, pero debes tener en cuenta este factor.
El presupuesto que tienes:
Al igual que hemos mencionado en el punto anterior, tanto los proyectores como los televisores los podemos encontrar en varias horquillas de precios. Si comparamos gamas y especificaciones, los proyectores suelen ser más económicos.
Sin embargo, también suelen tener menos funcionalidades y estar algo más limitados en este sentido, aunque a cambio, como ya te he comentado, nos dan más versatilidad para el lugar donde lo puedes usar.
El tipo de contenidos que vas a ver:
Me parece otro de los puntos más importantes. A fin de cuentas esto se resume en: ¿qué vas a hacer con los proyector o televisor? O mejor dicho, ¿para qué los vas a usar? Lo mejor de los proyectores es que pueden llegar a un tamaño mayor, por ejemplo, si vas a ver una peli, puedes ponerla a 300 pulgadas con muchos modelos, pero con el televisor te quedas en lo que tengas. ¿40 pulgadas? ¿50 pulgadas? ¿70 pulgadas si tienes mucho espacio? De ahí se puede pasar, por lo que si lo que quieres es montar una especie de cine en casa, con una gran dimensión de pantalla, el proyector es una excelente opción.
Sin embargo, si lo que priorizas es una calidad de imagen superior, con muy buenas tecnologías, en este caso creo que un televisor sería mi elección. Si lo vas a usar para conectar una videoconsola o quieres una tecnología de imagen espectacular, el televisor parece la mejor opción.
Conectividad y Smart:
Similar con lo anterior, pero con algunas diferencias que merece la pena apuntar, los televisores suelen tener mejores opciones de conectividad y también contenidos Smart.
Los proyectores poco a poco van dando pasos adelante y hacia opciones muy buenas, pero es algo que debes tener en cuenta, que debes revisar en la hoja de especificaciones.
Sonido:
Y quiero terminar hablando del sonido, si tomamos en cuenta las diferentes entre proyector o televisor. La verdad es que ninguna de las dos opciones, en gamas medias, tienen un apartado de sonido espectacular. Si vas a conectar dispositivos externos, como, por ejemplo, altavoces o barras de sonido, en general ambos te van a dar resultados muy similares.
Pero si quieres usar exclusivamente el sistema de sonido que trae incorporado, en general los televisores ofrecen mejores resultados que los proyectores en este campo.
Entonces, ¿yo qué me compraría? ¿Un proyector o televisor?
A título personal y si me preguntases hoy mismo, te diría que, bajo mis circunstancias personales, mis necesidades y mi presupuesto, me plantearía la opción de un televisor.
Otra cosa diferente es que quisiera un segundo aparato de imagen, en ese caso, elegiría un proyector para poder tener variedad, así podría aprovechar las ventajas de ambos dispositivos y usaría cada uno en las mejores circunstancias posibles. Siempre me he planteado que, si tuviera una amplia terraza o un jardín, compraría un proyector para montar una especie de cine de verano. Pero de momento no tengo esa opción, así que el televisor sigue siendo mi primera opción.