En esta página habéis visto muchas reviews de monitores. Todas tienen sus más y sus menos y cuentan con ofertas muy variadas. Hace un tiempo os hablamos de la LG 34UC99-W, una pantalla que nos sorprendió gratamente por todo lo que tenía que ofrecer. Pues hoy vamos a pegar un salto hacia otra de las marcas más renombradas del sector, Philips, que nos ha permitido probar su Philips 326P1H. Este dispositivo tiene muchos aspectos que merece la pena analizar y eso es lo que vamos a hacer en esta entrada. Sigue leyendo para descubrir cuáles son los factores diferenciales de este monitor de última generación. ¡Comenzamos!
El diseño novedoso del Philips 326P1H
En materia de diseño, lo primero que debemos destacar y por lo que creemos que este monitor va a llamar la atención, es su gran tamaño. Mide 92 x 55 x 9 cm y pesa unos 16 kilogramos. Está claro que no nos encontramos ante un monitor estándar y agradecemos mucho la facilidad de su montaje, ya que con estas dimensiones podría llegar a resultar muy difícil de manipular. Son tres piezas que encajan de forma sencilla; una base que no es tan grande como la esperábamos, y eso no es para nada malo ya que nos ahorra espacio, un brazo y la propia pantalla. Todo el conjunto se puede mover en muchas direcciones usando de eje giratorio a la base o al brazo, así como una subida y bajada del monitor.
Los materiales y acabados son de una calidad exquisita. Son plásticos de color negro en todo su conjunto pero la decoración ayuda mucho a que el monitor resalte como una pieza que realmente impresiona. La pantalla, en la que incidiremos un poco más adelante, no tiene bordes a excepción de la parte inferior, donde una pequeña barra emplaza el logo de la marca y los diferentes botones de manejo. Ya por la parte trasera podemos encontrar los altavoces y las diferentes conexiones con las que cuenta el dispositivo.
Una webcam incorporada
Una de las mejores cosas que tiene este monitor es la gran cantidad de añadidos de los que se compone. Uno de estos extras es la webcam que lleva incorporada de serie. Esta se encuentra en la parte superior y mientras no se esté usando se esconde dentro del propio aparato. Este es el sistema de Windows Hello PopUp que Philips ha decidido introducir en la Philips 326P1H. Con esta opción no solo ganaremos en comodidad y protección, sino que ahorraremos bastante dinero al no tener que comprar una cámara auxiliar con la calidad suficiente, ya que esta ya la tiene. Además, esta opción trabaja directamente con el sistema de Windows 10 y permite realizar un reconocimiento facial para poder acceder al ordenador.
¿Cómo funciona en aspectos de sonido?
Uno de los grandes problemas que solemos encontrar al comprar monitores, ya sean de la gama media o, incluso, de la gama alta, es que no todos llevan incorporados altavoces. ¿Qué pasa entonces? Pues el de siempre, que deberemos adquirir un sistema de sonido auxiliar que nos obligará a realizar una inversión más. Y no solo eso, sino que el monitor ya ocupa gran parte del espacio, tener que añadir al escritorio un buen grupo de altavoces se haría muy incómodo. Y lo bueno de este añadido es que funciona realmente bien, se escucha genial y nos permite ver series y películas de forma cómoda, sin depender de unos auriculares.
Una calidad visual muy alta
Como es lógico, lo que más os preocupará a la hora de leer este análisis es si merece la pena la adquisición de este monitor. Gran parte de la respuesta a esa pregunta se encuentra en si la calidad visual está a la altura de la oferta que Philips ha realizado con este modelo. Lo cierto es que a nosotros nos ha parecido una pantalla impresionante visualmente hablando. Es una superficie de 16:9 con 31,5 pulgadas, una diagonal de 80 cm que impresiona desde el primer vistazo por su tamaño. Una vez la encendemos, la resolución máxima de 2560 x 1440 píxeles sigue la norma establecida con este monitor, que prime la calidad. La tasa de refresco es de 75 Hz, mucho más alta de lo normal en este tipo de aparatos.
El ángulo de visión también es algo a destacar, no solo porque en materia de diseño hayan tenido en cuenta que el monitor se puede girar en todas las direcciones, sino que también lo han trabajado en la propia superficie. Son 178º de visión los que han conseguido con la Philips 326P1H, que junto al tratamiento del color hacen que se disfrute mucho el ver contenido audiovisual. Eso sí, no la vemos como una pantalla diseñada para el gaming, ya que debido al amplio tamaño, la cercanía puede llegar a ser un problema.
La importancia de las protecciones
Sin embargo, este modelo cuenta con una serie de protecciones visuales que aumentan mucho la calidad del producto. En primer lugar, hay que hablar de la dichosa luz azul que tanto daña nuestros ojos en los aparatos eléctricos con pantalla. El sistema LowBlue reduce la emisión de este tipo de luz y, a la larga, notaremos como nuestros ojos se cansan menos y aguantan más tiempo delante del monitor. También tenemos el sistema FlickerFree, este consigue que los parpadeos propios de este tipo de pantallas sean menos habituales. Este fallo es muy común y nosotros nunca lo notamos, pero nuestros ojos sí y termina cansando mucho la vista. Estos dos extras son una maravilla y estamos encantados de que hayan sido incluidos.
Las conexiones del Philips 326P1H
Sin lugar a dudas uno de los puntos más importantes en un monitor es la calidad de las conexiones con las que cuente. La cantidad también importa, es evidente, ya que permite realizar tareas de forma más cómoda, pero de poco sirve tener muchos conectores si no tenemos aparatos para ellos. En este caso, el Philips 326P1H cuenta con el DisplayPort 1.4 como conexión de mayor calidad, esta es la establecida en monitores de gama alta y la verdad que rinde muy bien. Además, cuenta con dos HDMI, un tipo de cable mucho más común y al que estamos más acostumbrados. La caja contiene un cable para cada una de estas dos conexiones. Aunque este apartado no termina, ya que este aparato permite conectar de forma directa con portátiles de última generación que cuenten con USB de tipo C. Finalmente, lo último que debemos decir es que se puede conectar la red de internet directamente al monitor con un cable RJ45, pero no llegamos a comprender la utilidad real de este añadido.
También debemos destacar que esta pantalla puede ser directamente conectada con la cuenta de Windows para realizar el desbloqueo facial que hemos comentado anteriormente. Esto concede mucha autonomía a la pantalla en materia de seguridad pero siguen siendo extras de los que no se depende tanto.
Características del Philips 326P1H
Philips 326P1H | ||
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Dimensiones (con soporte) | 92 x 55 x 9 cm | |
Peso (con soporte) | 16 Kg | |
Soporte | 28 cm | |
Colores | Negro | |
Materiales | Plástico | |
Pantalla | 31,5 pulgadas | |
Resolución | 2560 x 1440 píxeles | |
Proporción de Aspecto | 16:9 | |
Reproducción de colores | 16,7 M de colores | |
Tiempos de respuesta | 4 ms | |
Brillo | 350 cd/m2 | |
Ángulos de visión | 178º | |
Relación de contraste (típica) | 1000:1 | |
Conectividad | 1 x DisplayPort 1.4, 2 x HDMI 2.0, 1 x USB tipo C | |
Puertos USB | Sí | |
Certificación energética | A | |
Consumo energético | 39 W (típico) | |
Sitio oficial | Philips | |
Altavoces | Sí | |
Contenido de la caja | Monitor, Cable de alimentación, Manual de usuario, Cables de conexión y Garantía |
Disponibilidad y precio
El precio de este monitor es algo elevado, pero sin ninguna duda es una buena inversión para aquellos que busquen unas proporciones más grandes y una calidad visual premium. Por todo lo que nos ha ofrecido durante los días que hemos podido probarla tenemos que darle una muy buena nota, porque además la relación calidad precio también está muy a la altura. Dicho esto le concedemos el GizTele Gold Award.
Además, en los siguientes enlaces podréis adquirir este monitor de forma directa:
- Calidad visual muy alta
- Un diseño cuidado
- Buenas protecciones para la vista
- Conectividad más que completa
- Webcam y altavoces añadidos
- Hay que tener muy en cuenta su tamaño
- Existen ciertos añadidos con poca utilidad real