Hoy en día, incluso los móviles tienen pantallas OLED. Muchos de los televisores que entran en casa han hecho de esta una tecnología bastante habitual en los hogares, sin embargo, hasta hace no mucho no era lo habitual. Corría el año 2007 y el Sony XEL-1 revolucionó el sector. Trajo lo que en ese momento era “el futuro” a las miradas de los más incrédulos. Era el primer televisor OLED y sirvió para abrir boca ante lo que estaba por llegar.
Características del Sony XEL-1, el primer televisor OLED del mundo
Este modelo llegó a comercializarse, por un precio de 4.999 euros. Llegó a España en el año 2008 y, obviamente, no se convirtió en un fenómeno en ventas, pero sí en un objeto de deseo. A pesar de sus 11 pulgadas, tanto su tecnología de pantalla como su diseño hicieron de él un modelo disruptivo.
Contaba con tan solo 3 mm de grosor, lo que convirtió, en la época, en la pantalla más fina del mundo. Su diagonal era de apenas 28 centímetros y hacía uso de la tecnología OLED, con una resolución de 960 x 540 px. Entre sus econexiones físicas, se encontraban dos HDMI y un USB 2.0, mientras que, en lo que respecta al sonido, montaba un sistema de dos altavoces de 1.2W.
Como curiosidad, el cambio de moneda de Japón a España no fue simétrico. Mientras que en tierras niponas se pudo comprar por apenas 2.000 euros, a España llegó unos meses más tarde, ya coincidiendo con el cambio de año con un precio inflado a la máxima expresión: 4.999 euros, lo que hoy en día cuesta un televisor de 98 pulgadas de Redmi. Dejó de fabricarse en febrero 2010, tras convertise en el perfecto aperitivo de ese futuro que ahora es el presente.
Vía | XatakaHome