Si lees nuestras noticias diarias seguramente Runtime ya no te sorprenda tanto. Es una plataforma para ver contenido a la carta en streaming de manera gratuita y lo comparan muchísimo con Pluto TV, que ya vimos en su momento. Aun así, por supuesto, vamos a contarte todo lo posible sobre ella.
¿Qué es y cómo funciona Runtime?
Siendo el streaming el servicio indiscutible del momento y en aumento es normal que emprendedores quieran lanzarse al mercado, si creen tener un producto o servicio competente para probar suerte. Así, mientras las plataformas de pago crean nuevos planes y suben sus precios, otras, gratuitas como es el caso, brotan de la nada.
Runtine es una plataforma de contenido bajo demanda que vemos vía streaming. Aparece en primer lugar en América y, por fin, se han decidido por ofrecerlo en nuestro país.
Así se ve la nueva plataforma gratis de contenidos
Curiosamente, vas a encontrar bastante contenido español emitido hace tiempo en la tele en abierto, pero este no es el cien por cien de su catálogo, claro. El total, en este momento (recordemos que acaba de ser lanzado aquí) es de poco más de 1000 títulos clasificados en quince géneros y categorías. Estos son Para toda la familia, Más popular, Nuevo en Runtime, Series, Documental, Acción, Crime, Comedia, Romance, Thriller, Terror, Aventura, Historia, Drama y Clásicos. De momento se cuenta con diez canales, siete correspondientes a cine temático y tres para las series de TV.
Para ver Runtime puedes acceder a la página web desde cualquier dispositivo, con un navegador. Si bien, también cuenta con app en Roku, Fire TV, iOS, Google TV, Apple TV, Android y Android TV. Al no precisar de método de pago no es necesario un registro; es entrar y disfrutar.
Por supuesto, para poder ofrecer este servicio a coste cero, la plataforma se sustenta con anuncios. Son las marcas las que desembolsan una buena cantidad por dejar ver sus productos durante la reproducción de contenidos. Aun así, no te preocupes porque esta no es, ni mucho menos, abusiva; no se parece en nada al volumen que nos hacen tragarnos en la TV tradicional.
